LAS TRES R: REDUCIR, REUTILIZAR Y RECICLAR

Hola soy la Tierra, sí, sí el planeta Tierra, donde vivís. Hay tres palabras que empiezan por erre que me encantan. Son reducir, reutilizar y reciclar. ¿Sabéis porque me gustan tanto? Porque son palabras casi mágicas. Juntas pueden hacer que todos los seres vivos y yo misma seamos más felices. Digo que son “casi” mágicas porque solas no pueden hacer nada, os necesitan a todos los niños para poder hacer el truco. Sois cada uno de vosotros los verdaderos magos de las tres erres, las tres palabras que pueden cambiar el mundo. ¿Queréis saber cómo? Sí ¡Pues vamos a conocerlas! La primera R es la de Reducir. Si lo piensas un poco antes, hay montones de cosas que no necesitas. Cuando vas al supermercado seguro que puedes llevarte una bolsa para las compras en vez de usar las que allí te dan. Así reduces el uso del plástico que es muy contaminante. Seguro que tampoco hace falta que imprimas tantos documentos o fotos ni que dejes las luces, la televisión o el ordenador encendidos cuando no los estás usando. Si lo haces reducirás el uso de papel y de energía, y ayudarás a que haya menos contaminación. Y esto son solo unos pocos ejemplos. Seguro se os ocurren muchas más formas de reducir todo aquello que pueda generar un gasto o un desperdicio innecesarios. Te ayudará una simple pregunta antes de ir a comprar: ¿seguro que lo necesito o es un capricho? La segunda R es la de Reciclar. Ahora es más fácil que nunca reciclar las cosas que ya no necesitamos para que muchas vuelvan a ser usadas. Muy cerca de casa encontraréis lugares, como los puntos limpios, y recipientes adecuados donde depositar latas, plásticos, papel, residuos orgánicos o electrónicos. Tienen hasta sus colores propios para que los podías identificar fácilmente. Usándolos, evitaréis la contaminación de la naturaleza, de los ríos y mares, y también de la atmósfera, es decir del aire que respiráis. Y por fin la tercera R, la de Reutilizar. Cuántas cosas podemos usar muchas veces en vez de tirarlas a las primeras de cambio y darles una segunda vida útil, ¿no te parece? No sé, déjame pensar… Una hoja de papel que solo tiene una cara impresa, una botella de plástico, una caja de cartón… Sigue tú. Con un poco de imaginación estoy segura de que vas a crear montones de cosas nuevas, útiles y divertidas. Y recuerda: si usas la Regla de las Tres Erres vas a conseguir que yo sea un planeta más limpio, con menos contaminación y donde todos vivamos mejor. Porque ya sabéis… cambiar el mundo es cosa de niños.