¿QUÉ ES LA SIMBIOSIS?

Hola amigos, bienvenidos a un nuevo vídeo de... ¡Happy Learning! Mirad estas imágenes. Son seres vivos de distintas especies relacionándose entre ellos. Hoy vamos a conocer una forma de relación muy especial... la simbiosis. Simbiosis... ¡Qué palabra más rara! ¿Alguna vez la habías escuchado? Proviene de una palabra griega, que significa “vivir juntos”. Y es que en la simbiosis ocurre exactamente eso, dos especies completamente distintas, que no tienen nada, pero nada que ver entre ellas, se juntan y conviven muy estrechamente… ¡Sí!, como si fueran... ¡Un equipo! No lo hacen porque son muy amigas, ni porque se quieran mucho, lo hacen para obtener... un beneficio. En función de quién obtenga este beneficio y como afecte al otro, la simbiosis puede clasificarse en tres tipos: mutualismo, comensalismo y parasitismo. El mutualismo existe cuando en la simbiosis el beneficio es mutuo, es decir, cuando ambas especies sacan “provecho” de esa relación. Es el caso de esta abejita y esta flor. Las abejas se alimentan del néctar de las flores y a cambio esparcen su polen para que las flores se reproduzcan. ¡Es un buen trato! Las dos especies se aprovechan de su relación. Beneficio mutuo, mutualismo ¡¿fácil eh?! El comensalismo se produce cuando en la relación de simbiosis sólo una de las especies se beneficia, pero la otra no se da ni cuenta, porque no pierde nada, ni fu ni fa. Como estas rémoras, que siguen al tiburón ballena a todas partes para comerse las sobras de lo que caza y para protegerse de sus enemigos. Son unas caraduras, pero al tiburón no le molesta. Es muy cómodo el comensalismo ¿no os parece? El tercer tipo de simbiosis se llama parasitismo y es dañino para una de las especies... Sucede cuando uno de los organismos de la relación se beneficia a costa del otro dañándolo, enfermándolo o incluso, llegando a matarlo... La especie que se beneficia se llama parásito, de ahí el nombre parasitismo, y la especie que sale perjudicada, se llama huésped. El parásito puede estar fuera del huésped, como estas pulgas que no paran de molestar a este pobre perrito… O pueden estar dentro, como los virus y las bacterias, que hacen que nos pongamos enfermos. En cualquier caso, el parasitismo es una relación simbiótica pero…¡muy desagradable! Bueno ya hemos conocido la simbiosis y sus tipos: el comensalismo, el mutualismo y el parasitismo. ¿Sabéis que nosotros y nuestros perros también somos simbióticos? Claro nosotros los alimentamos y cuidamos y ellos siempre nos demuestran su amor y su cariño. ¡¡¡Adiós amigos, hasta el próximo vídeo!!!!